Encargado tanto del mantenimiento rutinario como de las acciones correctivas, el técnico de mantenimiento de ascensores es el principal garante de la seguridad de las instalaciones. Como tal, debe reunir ciertas cualidades esenciales para responder a las exigencias y responsabilidades inherentes al oficio de técnico de mantenimiento. Corresponde al operador del ascensor -o al proveedor de servicios encargado del mantenimiento del ascensor- seleccionar los perfiles adecuados y apoyar a los técnicos, día tras día, en la mejora de sus competencias:
- Conocimientos multidisciplinares: en primer lugar, la profesión de técnico de mantenimiento requiere verdaderos conocimientos técnicos, tanto teóricos como prácticos. Estos conocimientos ya no se limitan únicamente a la mecánica, puesto que con el desarrollo de los ascensores los técnicos deben tener competencias en electrónica, informática, conectividad y automatización.
- La calidad de la formación: la rápida evolución de las instalaciones exige que los técnicos de mantenimiento de ascensores actualicen periódicamente sus competencias y conocimientos. Por tanto, el ascensorista debe priorizar la formación continua de sus equipos. Lógicamente, también es esencial que el técnico esté interesado en esta formación y que se implique plenamente.
- La capacidad de evolucionar: además de su capacidad de aprendizaje, los técnicos de mantenimiento de ascensores deben saber adaptarse para seguir el ritmo de los cambios del sector y poder aprovechar al máximo las distintas innovaciones: informatización de las alertas, auge del mantenimiento predictivo, mejoras del software, digitalización del cuaderno de mantenimiento... El sector ha experimentado muchos cambios a lo largo de los años y sigue evolucionando.
- Habilidades interpersonales: las habilidades interpersonales desempeñan ahora un papel central en el trabajo del técnico de mantenimiento de ascensores. Como principal interlocutor del cliente, debe saber escuchar, enseñar y explicar la situación, responder a sus necesidades y hacer sugerencias: debe ser capaz de establecer una relación de confianza. Su capacidad de comunicación es también determinante para trabajar en equipo, plantear los problemas y aprovechar las competencias específicas de cada uno.
- Los recursos disponibles: a diario, el técnico de mantenimiento de ascensores debe aprovechar al máximo las herramientas y los recursos puestos a su disposición por el fabricante de ascensores para optimizar la calidad de su trabajo. Esto incluye el uso de soluciones de mantenimiento predictivo para anticiparse a las averías, o el uso de expertos a distancia, llamando a un equipo de asistencia por vídeo, por ejemplo, cuando se enfrenta a problemas complejos.