Las averías de los ascensores en las comunidades de propietarios son especialmente molestas para residentes y visitantes. Para evitarlas, es imprescindible un mantenimiento regular y unas buenas prácticas de uso.
Averías de los ascensores: identificar el origen
Hay dos fuentes principales de averías: las averías técnicas y las averías debidas a un mal uso o a actos malintencionados.
Una avería puede producirse cuando un componente del ascensor falla de forma intermitente o permanente, se desgasta excesivamente, pierde sus propiedades básicas o pierde su rendimiento inicial.
Pero muchas averías de ascensores en comunidades de propietarios se deben a malas prácticas de uso o a actos vandálicos. Desde forzar las puertas para abrirlas, hasta golpes en la cabina. Las averías también pueden deberse a acciones aparentemente insignificantes, como pulsar los botones con una llave (los botones se estropean y no funcionan igual), sobrecargar la cabina en mudanzas o subir a más personas de las previstas. En los dos últimos casos, el dispositivo de seguridad vinculado a la sobrecarga bloqueará la cabina.
¿Cómo evitar una avería del ascensor en una comunidad de propietarios?
Como administrador del edificio, conserje o administrador de la comunidad de propietarios, puede publicar advertencias sobre el uso correcto del ascensor para evitar averías: no forzar las puertas, no superar el peso máximo autorizado, no saltar dentro del ascensor, etc.
Los ascensoristas tienen la obligación legal de realizar visitas de mantenimiento según el equipo. Durante esta visita periódica, los técnicos realizan comprobaciones e inspecciones y, si es necesario, analizan los errores para corregirlos antes de que provoquen una avería en el ascensor.
KONE también ofrece mantenimiento predictivo en todas las marcas de ascensores: un dispositivo recoge datos sobre el funcionamiento del ascensor cada vez que se mueve. Estos datos se envían a la nube y se comparan mediante Inteligencia Artificial con los del propio ascensor y los de otros equipos similares para detectar cualquier desviación. Si es así, se activa una alerta y, tras un análisis por parte de nuestros expertos, nuestros equipos técnicos realizarán la operación adecuada en función de la avería identificada.
El mantenimiento predictivo de KONE nos permite detectar los inicios de las averías e intervenir antes de que se produzcan.